Ruta: Balneario de Alicún de las Torres - Petroglifos del Cerro de la Mina – Dólmenes y Menhir de Alicún – Acequia del Toril. Comarca de Guadix.

Recorrido: 6 km

Tiempo:

Fecha: Octubre 2.021

El inicio de la ruta lo tenemos en el balneario de Alicún de las Torres, donde existe un aparcamiento.  

Para la primera parte de la ruta retrocederemos por la carretera dirección Gorafe, saliéndonos por una pista que parte a nuestra derecha y asciende por detrás del balneario hacia el Cerro de la Mina. Cercanos a la cumbre visitaremos un conjunto de petroglifos,

símbolos grabados en la roca de época Neolítica. 

En concreto hay cuatro rocas en las que podemos distinguir distintas figuras antropomorfas, formas humanas y un gran sol. 

La vuelta la hacemos por el oeste, retornando a la carretera. 

Nos topamos con la Vereda de Chirlata, donde iniciamos la segunda parte de la ruta: Los Dólmenes, Menhir y la Acequia del Toril.

Lo primero que nos vamos a encontrar es el Menhir de la Lluvia. 

El marcado sendero nos asoma a un cortado desde donde contemplamos la Acequia del Toril, otra acequia más pequeña y entre las dos, la senda que recorreremos más tarde. Existe una tercera acequia al otro lado del murallón de la del Toril .

Seguimos la senda que ahora nos acerca hasta 3 dólmenes.

Dolmen 1.

Dolmen 2.

Dolmen 3.

Posteriormente giraremos hacia el norte para descender por una zona rocosa junto a una acequia seca. 

Llegamos a la Acequia del Toril, junto a la que discurre el sendero.

La acequia probablemente de origen paleolítico se encontraría originalmente a nivel del suelo y con el paso de los años se fue convirtiendo en acueducto de forma natural por la precipitación y sedimentación de las sales del agua. 

El agua que discurre a más de 35 grados, ha ido disolviendo la roca caliza, cargándose de carbonato cálcico que se ha ido depositando formando una roca de gran dureza que se conoce como travertino.

Por un paso bajo la acequia, accedemos al otro lado. 

Se trata de un lugar mágico, tanto por la vegetación como el colorido.  

La senda discurre ahora entre el muro de la Acequia del Toril a la derecha y otra acequia más baja a nuestra izquierda. 

De las tres acequias paralelas, únicamente la del Toril crece unos 3 milímetros de altura al año; como por las otras no corre el agua, se encuentran estabilizadas.

Por otro lado al estar secas solo vemos la estructura rocosa que forma el muro, nada que ver con la abundante vegetación que adorna la Acequia del Toril.

Con una anchura de 3 metros en su base y 70 centímetros en su parte superior, supera los 15 metros de altura en algunos puntos del muro. 

El muro va perdiendo altura y al final logramos ver como corre el agua por la acequia,

hasta  rebosar en forma de cascada.

Al ser agua termal el agua se encuentra a unos 35 grados. 

El carbonato cálcico del agua se ha ido acumulando, formando esta cascada de travertino de gran belleza y colorido. 

En el camino de vuelta al balneario, visitaremos otros dos dólmenes más.

Dolmen 4.

Dolmen 5.

Enlazamos con una pista que se dirige a una terraza-mirador,

con vistas a lo que parece un campamento.

Atravesamos la acequia del Toril por un par de túneles, uno escalonado

y por otro a modo de cueva,

 

que nos deja en un mirador natural.

Volvemos por nuestros pasos, para continuar por la pista

que seguiremos hasta el balneario, donde damos por finalizada la ruta.

Nos vemos en las Montañas  

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