Ruta: Monasterio de las Batuecas - Cascada del Chorro, P.N. de las Batuecas, Sierra de Francia, Salamanca.
Recorrido: 15 km
Tiempo: 05:00
Fecha: Octubre 2.020
Existe un aparcamiento principal en la carretera de La alberca a Mestas, desde donde parte la Senda accesible “Valle de las Batuecas”. Aunque hoy no hay problemas de aparcamiento, optamos por dejar el coche un poco más lejos, en otro parking habilitado a 1,5 km del primero.
El sendero que une ambos aparcamientos bien merece este tramo extra
La ruta discurre paralela al Río Batuecas,
en la cuenca hidrográfica del Tajo.
Llegamos al aparcamiento principal, el más cercano al monasterio, desde donde se inicia una senda accesible, en la que se han instalado algunas pasarelas.
Situado en el término municipal de La Alberca, Las Batuecas es uno de los parajes más conocidos de la Sierra de Francia.
Salimos a la carretera de acceso al Monasterio Desierto de San José de Batuecas, actualmente cerrada al tráfico.
Fundado a finales del siglo XVI y ocupado por la Orden de los Carmelitas Descalzos.
La senda continua junto al muro trasero del monasterio.
Eucalipto del Convento.
Vemos un puente con indicaciones hacia el Mirador de San José, al que decidimos subir.
Pasamos por los restos de la Ermita de San Juan Bautista, una de la veintena de ermitas diseminadas por el valle en ambas márgenes del río.
Vistas al monasterio desde el mirador.
En la bajada pasamos por la fuente de San José.
Retornamos a la senda principal,
que seguimos hasta el desvío al Canchal de las Cabras Pintadas,
conjunto de pinturas rupestres del Neolítico, que visitamos.
Descendemos de nuevo, para continuar progresando junto al río.
Llegamos a un nuevo cruce con indicaciones hacia el Canchal de la Umbría del Cristo, y el Canchal del Zarzalón, abrigo de pinturas rupestres hacia el que nos dirigimos,
La ruta hacia el Chorro de las Batuecas continúa por aquí arriba, alejados del río,
atravesando una zona con bastantes enebros con porte de árbol y jaras pringosas.
La senda desciende de nuevo al río Batuecas,
poco antes de alcanzar la Cascada del Chorro, que encontramos con muy poca agua.
Coincidimos con un pequeño grupo de la zona, que nos invitan a un hornazo casero, que por cierto estaba riquísimo.
La vuelta la hacemos por el mismo camino que nos ha traído hasta aquí,
exceptuando la subida al Canchal de las Cabras Pintadas y al Mirador de San José.
Nos vemos en las Montañas
